Hagamos un poco de historia familiar. Hacia 1850 (siglo XIX) D. Pedro Aznar, un sevillano amante del arte y los negocios se casó con Dña. Carmen Espinosa y tuvieron 13 hijos. Uno de ellos se llamaba Antonio y la última Concha. Hacia el año 1915 (siglo XX) Antonio emigró a la Argentina y en un viaje odisea que poca gente conoce llegó a Mendoza (qué buen ojo tuvo el abuelo) donde se casó con una mujer de San Juan llamada Juana. Tuvieron hijos, nietos y bisnietos.
Mientras tanto Concha, la banjamina de esa gran familia, también hacia 1915 (siglo XX) se casó con Vicente Alberti y tuvieron hijos e hijas. Una de ellas: mi madre: Maria Alberti Aznar.
Y mirá vos! que en el año 2010 (siglo XXI), cien años despues de aquellos dos acontecimientos, llego yo a Mendoza, abro la guia de teléfonos y veo que hay una docena de Aznar. Marco el primer numero y ¿quien me responde? la mujer de Carlos Aznar, uno de los dos nietos de Antonio.
- Has dado en la tecla correcta - me dice y luego me pasa a Carlos. A partir de ese momento, reencuentro, anécdotas, recuerdos, papeles, fotos, risas y champán en una noche mágica e inolvidable.
Mientras tanto Concha, la banjamina de esa gran familia, también hacia 1915 (siglo XX) se casó con Vicente Alberti y tuvieron hijos e hijas. Una de ellas: mi madre: Maria Alberti Aznar.
Y mirá vos! que en el año 2010 (siglo XXI), cien años despues de aquellos dos acontecimientos, llego yo a Mendoza, abro la guia de teléfonos y veo que hay una docena de Aznar. Marco el primer numero y ¿quien me responde? la mujer de Carlos Aznar, uno de los dos nietos de Antonio.
- Has dado en la tecla correcta - me dice y luego me pasa a Carlos. A partir de ese momento, reencuentro, anécdotas, recuerdos, papeles, fotos, risas y champán en una noche mágica e inolvidable.
Mirá vó.
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